Este video es parte de una serie de 11 mapas animados.

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Un ejemplo de un mapa animado

La cuarta cruzada


En agosto de 1198, el papa Inocencio III llamó a una nueva cruzada. Jerusalén seguía estando en manos de los musulmanes y los Estados latinos de Oriente se encontraban debilitados.

Tal como lo hicieron Ricardo Corazón de León y Felipe Augusto durante la tercera cruzada, los señores occidentales prefirieron emprender la ruta marítima para viajar a Oriente.

Para ello, fueron necesarios una gran cantidad de buques y un contrato firmado en Venecia que preveía el transporte de 30.000 cruzados a cambio de una fuerte suma de dinero.

Pero durante el verano de 1202, los cruzados que acudieron a Venecia no eran tantos como se había previsto y no pudieron reunir la suma acordada. Enrico Dandolo, antiguo dux, aceptó anular la deuda si los cruzados lo ayudaban a someter la ciudad de Zara en la costa dálmata. Esta ciudad, anteriormente controlada por Venecia, se encontraba entonces bajo la autoridad del rey de Hungría.

Esta proposición provocó numerosas disensiones ya que los húngaros eran católicos. Algunos cruzados abandonaron la cruzada y volvieron a sus hogares, mientras que otros izaron velas directamente hacia la Tierra Santa.

Sin embargo, la mayoría de los cruzados aceptó el trato del dux y tomó la ciudad de Zara, en noviembre de 1202. El papa, furioso al enterarse de la noticia, los excomulga inmediatamente.

Luego, los cruzados hacen una escala en Corfú, donde recibieron la visita de Alejo IV Ángelo, pretendiente a la corona imperial de Constantinopla. Éste les propuso pagar su deuda en Venecia a cambio de ayuda para reconquistar su trono…

En junio de 1203, los cruzados iniciaron el asedio de Constantinopla. El 17 de julio, lograron apoderarse de varias secciones de las murallas de la ciudad. El emperador reinante huyó y Alejo IV subió al trono con su padre Isaac.

Pero, a finales de enero, Alejo IV fue asesinado por un cortesano que tomó su lugar con el nombre de Alejo V.

Ante la negativa del nuevo soberano a respetar el contrato financiero acordado entre su predecesor y los cruzados, estos atacaron nuevamente la ciudad.

El 12 de abril de 1204, Constantinopla fue nuevamente tomada y saqueada. Los cruzados recuperaron tesoros, estatuas y numerosas reliquias y, algunos de ellos, fueron llevados a Occidente, como los famosos caballos de San Marco de Venecia…

Los cruzados compartieron el imperio y eligieron a uno de los suyos como emperador latino de Constantinopla. Venecia aprovechó para constituir un vasto imperio marítimo y, sobre todo, recuperó Creta y las islas jónicas.

Varias familias nobles bizantinas fundaron sus propios Estados en las regiones que escapaban al control de los latinos: así es como se crean el Imperio de Nicea, el Imperio de Trebisonda y el Despotado de Epiro.

La cuarta cruzada perdió totalmente de vista el objetivo inicial. La división del Imperio bizantino benefició a los turcos, quienes siguieron controlando Asia menor, y a Venecia, que pasó a ser la gran potencia marítima del momento.