Este video es parte de una serie de 7 mapas animados.

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Un ejemplo de un mapa animado

Roma, desde el nacimiento hasta la caída (versión escolar)


En sus comienzos, Roma era una modesta ciudad de Italia que finalmente termina dominando a todo el Mediterráneo.

Al principio la ciudad fue un reinado, luego una república y, por último, un imperio.

Desde el 753 hasta el 509 a. n. e., Roma fue gobernada por reyes. Después de Rómulo, el legendario fundador, le siguieron reyes de origen sabino y luego reyes etruscos, el último de ellos fue Tarquino el Soberbio. Bajo la República, la ciudad es gobernada por el Senado, en manos de los romanos más ricos, y por dos cónsules elegidos cada año. Se trata de un periodo en el que hubo muchas guerras.

En un primer momento Roma conquista Italia.

Durante las guerras púnicas, Roma lucha contra Cartago, y se apodera progresivamente de sus territorios en el Mediterráneo. La ciudad fue tomada y totalmente destruida en el año 146 a. n. e.

Una vez vencida su gran rival, Roma parte a conquistar la cuenca del Mediterráneo y los ejércitos romanos penetran en el sur de la Galia, de España y luego de Grecia.

El prestigio de estas victorias militares, permitieron a los generales romanos reivindicar el poder político. El más famoso de todos ellos, Julio Cesar, conquista las Galias y regresa a Roma con el título de “dictador de por vida”. Será asesinado más tarde, en el año 44 d. n. e. Su hijo adoptivo, Octavio, funda el imperio y decide llamarse Augusto, concentrando entre sus manos, todos los poderes. Augusto extiende el territorio del mundo romano hasta tres grandes ríos: el Rin, el Danubio y el Éufrates.

Fue durante el segundo siglo, bajo el reinado del emperador Trajano, que el imperio alcanza sus mayores dimensiones. Dentro de las fronteras, el largo periodo de paz que reina entre los distintos pueblos, favorece la prosperidad económica. Los habitantes, principalmente aquellos de las ciudades, adoptan la cultura y el modo de vivir romano, y en el año 212, el emperador Caracalla otorga la ciudadanía romana a todos los hombres libres del imperio.

Pero es difícil defender y administrar el imperio romano debido a su enorme tamaño. A mediados del siglo tercero, pueblos germánicos   ̶ los francos, los godos y los alemanes- penetran profundamente al interior del imperio. En el año 330, el emperador Constantino funda la segunda capital, Constantinopla, más cerca de las regiones del este del imperio. Sesenta años más tarde, el Imperio romano de Oriente y el Imperio de Occidente se separan definitivamente. A partir de principios del siglo V, la situación militar es crítica en la parte occidental.

En el año 406, varios pueblos germánicos, vándalos, suevos y alanos cruzaron el Rin, devastaron la Galia y llegaron hasta España. En el año 410, los visigodos invadieron Italia y saquearon Roma. En el año 429, los vándalos pasaron a África del Norte y conquistaron Cartago. El último emperador, Rómulo Augústulo, es depuesto por el jefe germánico Odoacro en el año 476, lo que simboliza el fin del Imperio romano de Occidente.

El Imperio romano de Oriente perdura hasta la toma de Constantinopla en poder de los turcos en 1453.