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Un ejemplo de un mapa animado

Las conquistas de Alejandro Magno


En 336, Filipo de Macedonia es asesinado y su hijo Alejandro de 20 años es proclamado rey.

En cuanto accede al poder manda ejecutar a todos sus rivales potenciales,  y reprime sin piedad una revuelta de las polis griegas contra la dominación macedonia.

En 334 Alejandro retoma el proyecto de su padre de unir los griegos contra los persas y lanza una nueva campaña en Asia Menor.

Su primera victoria cerca del río Gránico le abre la vía de Sardes, capital del sátrapa de Lidia, y además, la de las polis griegas de la costa: Éfeso, Mileto y Halicarnaso.

Penetra entonces  en el interior del país, llega a Gordio donde parece ser cortó el nudo gordiano e impone su autoridad sobre toda la península hasta el río Halis.

Una vez lograda la liberación de las polis griegas de Asia Menor, Alejandro emprende ahora la conquista de la fachada mediterránea del Imperio persa. Atraviesa los montes Tauro y se enfrenta victoriosamente al rey Darío en la planicie de Issos.

Mientras que el rey aqueménida repliega sus tropas  hacia el Éufrates, Alejandro    se apodera de Tiro y Gaza y entra, sin resistencia alguna, en Egipto donde probablemente es coronado como faraón.

A comienzos del año 331 funda Alejandría, consulta el oráculo del dios Amón en el oasis de Siwa y vuelve a Tiro.

Mientras que los persas se muestran dispuestos a negociar, Alejandro prepara una campaña hacia el interior del imperio. Durante el verano del año 331 cruza el Éufrates y después el Tigris e infringe una nueva derrota a Darío en  Gaugamela.

La fuga del rey persa le abre las puertas de las capitales del imperio: Babilonia, Susa y luego Persépolis, a la que prende fuego para vengar la destrucción de la Acrópolis, en Atenas, 150 años atrás.

La resistencia opuesta al invasor griego sigue siendo enérgica e intensa hasta el asesinato de Darío por parte de miembros de su entorno.

Inmediatamente después, Alejandro reivindica la herencia del rey persa e intenta evitar la explosión del imperio. A pesar de la reticencia de sus generales se da a la difícil conquista de las provincias orientales.

Durante el año 329 los griegos atraviesan el macizo del Hindú Kush y pasan al Asia central. Alejandro invierte tres años para imponer su autoridad a los jefes locales de Bactriana y Sogdiana.

En la primavera del año 326 Alejandro, que ha reunido un nuevo ejército, llega hasta el valle del Indo y aplasta las tropas del rey Poros y sus 200 elefantes.

Ante el rechazo de sus hombres de seguir adelante, Alejandro desciende el Indo hasta el mar y organiza la vuelta de su ejército vía tres itinerarios diferentes.

Para evidenciar su deseo de fusionar griegos y asiáticos en un solo pueblo, Alejandro organiza, en Susa, el matrimonio de 10.000 de sus compañeros con mujeres asiáticas y el suyo con la hija mayor de Darío.

Alejandro Magno muere en Babilonia en el año 323 sin heredero. Son entonces sus generales, los diádocos, quienes se reparten su sucesión.