Un ejemplo de un mapa animado

La solución final


El antisemitismo de Hitler y de su régimen se radicalizó durante la Segunda Guerra Mundial y, en la terminología nazi, la palabra Entfernung (distanciamiento), que se refería al proyecto de expulsar al pueblo judío, fue remplazada por la palabra Endlösung (solución final) 

La ocupación después de la invasión de Polonia, en septiembre de 1939, fue sumamente brutal: las élites polacas fueron masacradas de manera planificada y las comunidades judías fueron progresivamente confinadas en guetos. 

El primer gueto fue creado en Piotrków a partir del mes de mayo de 1939 y, luego, estos lugares se fueron multiplicando rápidamente.

Los más grandes fueron creados en Lodz y en Varsovia, en el transcurso del año 1940, y luego en Cracovia y Lublin, a principios de 1941.

En estos guetos polacos también se confinaban a decenas de miles de judíos deportados desde la parte oeste del Gran Reich.

La superpoblación y las escasas raciones alimenticias causaron rápidamente una importante mortalidad.

En junio de 1941, las exacciones se agravaron más con la invasión de la URSS. Siguiendo el avance del ejército alemán, las unidades móviles Einzsatzgruppen, estaban encargadas de eliminar a aquellos que el régimen nazi calificaba de «agentes del judeobolchevismo», es decir, los dirigentes del partido comunista, los resistentes y los judíos.

Durante el verano, los jefes nazis ordenaron que también se ejecutara a mujeres y niños. Las masacres, algunas veces perpetradas con la participación de los pueblos locales, tomaron una dimensión de genocidio y algunas llegaron a contar más de 10.000 víctimas.

Esta radicalización se observó, por ejemplo, en la región de Zhitómir​.

- en julio de 1941, se asesinaron a 3.000 judíos,

- en el mes de agosto, a aproximadamente 10.000 y,

- en los primeros días de septiembre, a alrededor de 27.000.

Durante el otoño de 1941, se multiplicaron las masacres de gran magnitud coincidiendo con el avance de los ejércitos alemanes.

- El 29 y 30 de septiembre, unos días después de la toma de Kiev, en el barranco de Babi Yar, en las orillas de la ciudad, se mataron a 34.000 judíos.

- En la segunda quincena de octubre, las tropas rumanas que participaron en la ofensiva junto a los alemanes, masacraron a más de 20.000 judíos en Odesa.

- Entre noviembre y diciembre, en Crimea, se mataron a más de 17.000 judíos.

A finales de 1941, Karl Jäger, que dirigía la unidad del Einsatzgruppe A, pudo anunciar que se había «solucionado» el problema judío en Lituania y envió a Berlín la macabra contabilidad de 5 meses de masacres por un total de 137.346 víctimas.

El 20 de enero de 1942, en Wannsee, en las afueras de Berlín, tuvo lugar una reunión de responsables nazis dedicada a «la solución final del asunto judío».

El informe de dicha reunión muestra que, a la fecha, el proyecto de Hitler y de su séquito era exterminar a todos los judíos y gitanos de Europa, que estimaban en unos 11 millones de personas.

Mientras redoblaban las matanzas en los territorios de la URSS, las autoridades alemanas comenzaron a organizar el asesinato de los judíos de Europa Oriental y de los guetos polacos en campos de exterminio y de manera industrial.

Estos campos, en los que casi todos los deportados eran gaseados en cuanto llegaban, se encontraban a lo largo de las líneas del ferrocarril, cerca de grandes guetos:

-Treblinka, Sobibor, Majdanek y Belzec, en el Gobierno General de Polonia.

-Chelmno y Auschwitz Birkenau, los más grandes de todos, en la Polonia anexada. 

En Auschwitz, las primeras víctimas de las operaciones masivas de gaseado fueron los judíos de Eslovaquia, en mayo de 1942.

Luego, durante más de dos años les siguieron interminablemente los convoyes de deportados provenientes de la parte más grande de Europa:

En junio salieron los primeros cuatro trenes desde París.

En julio, los primeros siete desde Países Bajos, donde acababan de empezar arrestos masivos de judíos.

En agosto, se sumaron los convoyes provenientes de Bélgica, Luxemburgo y Zagreb, de donde fueron deportados varios miles de judíos croatas.

Durante el otoño, dos convoyes también llevaron hacia Auschwitz a cientos de judíos noruegos que no tuvieron tiempo de refugiarse en Suecia.

En enero de 1943, varios convoyes salieron del gueto de Theresienstadt, de Berlín y de Países Bajos.

En la primavera comenzó la deportación de judíos de Salónica. Cerca de 45.000 miembros de esta comunidad que existe desde la antigüedad, murieron en las cámaras de gas de Auschwitz.

En septiembre de 1943, las tropas alemanas ocuparon el norte de Italia, que acababa de capitular frente a los Aliados. Inmediatamente, en octubre y noviembre, se organizaron redadas en las que se deportaron a Auschwitz cerca de 8.000 judíos italianos.

A principios de 1944, siguieron las deportaciones desde Países Bajos, Francia e Italia.

En marzo, se organizaron nuevas redadas en Grecia y cerca de 6.500 judíos fueron deportados desde Atenas.

Al mismo tiempo, las tropas alemanas ocuparon Hungría. El pueblo judío, que hasta entonces había estado protegido por su gobierno, fue inmediatamente reunido dentro de guetos o campos especiales.

El 15 de mayo de 1944 comenzaron las deportaciones hacia Auschwitz. En menos de dos meses, más de 430.000 judíos fueron deportados antes de que el gobierno húngaro decidiera interrumpir el envío de los convoyes.

A pesar del avance del Ejército Rojo al este y de los Aliados al oeste, los alemanes siguieron organizando deportaciones hacia Auschwitz durante el verano de 1944:

Desde Rodas en julio.

Desde Italia y Francia en agosto.

Desde Países Bajos y Theresienstadt en septiembre.

En noviembre de 1944, los alemanes destruyeron las instalaciones de exterminación de Auschwitz para borrar las huellas del genocidio.

Los nazis practicaron otras formas de masacre, como los gaseados dentro de camiones o las «marchas de la muerte» en las que la gente moría extenuada.

Es imposible hacer un censo exhaustivo de todas las víctimas.

Las estimaciones que efectuaron diferentes historiadores apuntan a que 5 o 6 millones de judíos europeos fueron asesinados entre septiembre de 1939 y mayo de 1945, de los cuales tres millones vivían en Polonia y un millón en la URSS.