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Suscribir1915 La multiplicación de los frentes
La batalla decisiva no se ha presentado y el conflicto se adivina mucho más largo de lo que habían previsto los Estados Mayores. A lo largo del año 1915, la entrada en guerra de nuevos beligerantes conduce a una multiplicación de los frentes.
El primero de ellos, el Imperio otomano, que se ha unido a las potencias centrales, inicia operaciones militares en el Cáucaso y en las provincias árabes del imperio.
A comienzos de 1915, los dirigentes franceses y británicos deciden llevar a cabo una acción en los estrechos; uno de sus objetivos es el de restablecer y facilitar las comunicaciones con el aliado ruso. La operación naval y el desembarco de tropas en el estrecho de los Dardanelos son un fracaso.
En el mes de mayo, luego de un largo periodo de indecisión Italia renuncia a su neutralidad y se une a los Aliados.
El ejército italiano, que pretende hacerse de Trieste, lanza varias ofensivas en el frente del río Isonzo con un elevado costo en hombres. Las conquistas territoriales son sin embargo limitadas frente a las sólidas líneas de defensa austrohúngaras.
Por su parte, la prioridad en este momento para el Estado Mayor alemán es el frente este, donde busca vencer a Rusia para, en una segunda fase, desplegar sus efectivos en el frente francés.
En mayo, los ejércitos alemanes y austrohúngaros lanzan una serie de ofensivas victoriosas en Lituania, Polonia y Galitzia y, para mediados de septiembre, el frente se ha desplazado sobre una línea que va desde Riga hasta la frontera rumana. El ejército ruso retrocede tras pérdidas incontables pero, contrariamente al objetivo del Estado Mayor alemán, no queda fuera de combate.
En el frente oeste la infantería francesa multiplica los ataques desde el inicio del invierno. Estas operaciones se traducen en bajas considerables, a cambio de conquistas territoriales derisorias. No obstante, el general Joffre no ceja en su empeño de destrozar el frente alemán y alista medios humanos y materiales cada vez más importantes.
La ofensiva más vigorosa es lanzada en la región de Champaña el 25 de septiembre. Un bombardeo con artillería pesada durante 3 días, y una segunda operación franco-británica en la región de Artois, preceden a esta ofensiva.
Una vez más las brechas abiertas en las primeras líneas alemanas son cerradas rápidamente, y la ofensiva se extingue sin lograr una victoria decisiva.
En el otoño de 1915, Bulgaria entra en el conflicto y participa en la ofensiva de las tropas alemanas y austrohúngaras contra Serbia.
El desembarque de un contingente francés en Salónica para apoyar a su aliado no puede salvar del desastre al ejército serbio.